Xenofobia

Creo que es necesario (por lo menos para mí) ahondar en el tema sobre el cual estaba desvariando en mi anterior post: la xenofobia causada por la influenza.

No puedo asegurar ni mantener una postura acerca de esta epidemia, yo siempre he abogado por otorgar el beneficio de la duda, en cualquier situación. Así que mi actitud hacia este acontecimiento es básicamente tomarlo con precaución y evitar la paranoia. Inevitablemente recibes información de todos lados, y como calificaba Abel anteriormente, con un adjetivo del que me declaro fan, recibes correos electrónicos alternativointensitos, con teorías que obviamente no puedes comprobar.

Pero a pesar de que he tratado de no contaminarme con tantas cosas que rondan en los medios, esta xenofobia sí me causa cierto desconcierto. Comenté que la había encontrado en comentarios de videos de youtube, y apenas me encontré con una nota en El Universal que toca el tema: Mexicanos residentes en otros países, (específicamente en Argentina) víctimas de discriminación y malos tratos. Quiero pensar que están siendo amarillistas, que no todos los argentinos son así y que todo es causa de la desinformación. Porque se refieren a algunos compatriotas que residen en ese país desde hace mucho, la gente los conoce, hace meses que no viajan a México, y aún así las personas les rehúyen, se tapan la boca por temor a compartir el mismo aire, cuchichean y los culpan del virus H1N1. ¿Acaso hay algún estudio que diga que los mexicanos traemos el virus en los genes?

Otra situación se dio en el ámbito futbolero. El Guadalajara enfrentaría al Everton de Chile. El equipo mexicano fue víctima de discriminación desde su llegada a aquel país, medidas que podrían parecer exageradas (aunque bueno, con la paranoia actual puedo comprenderlas). Al salir a las calles la gente se les quitaba de enfrente, se tapaban la boca. Ya dentro del calor del partido (ya saben cómo son de intensos los futbolistas :P), el jugador Héctor Reynoso escupió a un jugador contrario. Gran error.


Igual de malo me parecieron las respuestas de algunos mexicanos en torno a las reacciones. Y es que se que en este país existe un patriotismo exagerado, un extraño apego a los colores de la bandera. Una aspiración a querer ser mejor que todos (México lindo y querido, si muero lejos de ti…). Y responden al odio con más odio, a la discriminación con más discriminación. Y usualmente Pagan justos por pecadores.

No soy religiosa, pero me gusta la expresión “Todos somos hijos de Dios”. Y sé que corro el riesgo de sonar como una Miss promotora de la paz mundial. Pero no entiendo cuál es el afán por creernos mejores por vivir en x lugar, por comer x cosa, por usar x ropa. Yo me pregunto ¿Qué pasa por la cabeza de estas personas al escribir este tipo de comentarios?